«Escribir este poemario fue una manera de darle nombre y razón a todos aquellos sentimientos que no sabía cómo expresar y por los que estaba pasando. Pandora fue verter el vaso y dejar salir después de años quedándome para mí todo aquello que me hacía daño…»
Queridos lectores, hoy vamos a hablar de Pandora, escrito por Carlota Valdivia y publicado por el Grupo Editorial Europa.
Pandora es pura poesía, es el soplo de la vida, es la mano que acaricia y nos da alivio y esperanza.
En esta magnífica colección de poemas, la palabra se convierte en el hilo conductor que nos guía en el laberinto de los conflictos internos y en los abismos de las emociones extremas a las que la vida, a menudo, nos somete.
Pandora, publicado por el Grupo Editorial Europa, nos gustó mucho y por eso decidimos entrevistar a Carlota Valdivia para conocerla mejor y descubrir algo más sobre su obra…
A continuación ofrecemos la entrevista a la autora…
¡Buena lectura!
¿Qué le gustaría decirle a sus lectores?
Me gustaría decir que Pandora es un lugar seguro. Es un sitio para sanar y hacerlo sin que nadie te juzgue. Pandora tiene lugar para cualquier emoción, ya sea pequeña o grande, ya sea buena o mala. Pandora está aquí para ayudar, para hacernos mejores y para ver que el proceso no es lineal, ni que tampoco hay una línea de meta clara. Es un viaje que continúa en el tiempo, que a veces será bueno, otras veces malo, pero que siempre será enriquecedor y del que saldremos más fuertes. Pandora es para todos aquellos a los que siempre nos han dicho que somos demasiado o nunca suficientes. Para los que hemos creado una coraza blindad para que nadie entrase y de la que ahora no podemos escapar.
¿Hay un momento en particular que le empujó a escribir este libro?
No fue solo un momento, sino un conjunto de ellos. Escribir este poemario fue una manera de darle nombre y razón a todos aquellos sentimientos que no sabía cómo expresar y por los que estaba pasando. Pandora fue verter el vaso y dejar salir después de años quedándome para mí todo aquello que me hacía daño. Y no solo daño, sino aquello que me entristecía y me hacía feliz. Fue una manera no solo de sanar, sino también de aprender a soltar para poder rellenar ese espacio de cosas mejores. Muchas cosas influyeron en el porqué de este libro, pero también lo veo como una oportunidad de ayudar a sanar. Hay mucha gente que no sabe expresar tan fácilmente cómo se siente, con lo que es esencial que encuentren un espacio seguro para hacerlo. Pandora es ese espacio.
¿En qué escritores se inspiró?
Hay muchos autores que son capaces de expresar lo que pasa en sus cabezas a través de la poesía, pero si tengo que nombrar dos, serían la gran Rupi Kaur, con su Otras maneras de usar la boca, que para mí marcó un antes y un después en la manera en como la poesía era percibida, y Sharif Fernández, con su Lo vívido vivido, un libro que llegó a mis manos como parte de un regalo y que con la crudeza de sus palabras me hizo ver el mundo desde otro punto de vista.
¿Qué significa “transfiguradora” para usted?
Para mi “transfiguradora” significa cambiar, metamorfosear y transformar en algo completamente distinto a lo que era el inicio. Y eso es exactamente lo que hace este libro: desde el inicio hasta el final es un camino que te cambia la forma de ver el mundo. Asimismo, es lo que me pasó a mí cuando escribí los poemas. Fue un proceso de cambio y crecimiento personal que resultó en una persona completamente distinta a la que empezó escribiendo las primeras palabras. Espero que sea eso, un viaje transfigurador, lo que los lectores puedan experimentar entre las páginas de Pandora.
¿Por qué eligió ese título?
El título non es ninguna casualidad. A medida que escribía los poemas me di cuenta de que soltar todo lo que llevaba dentro era como abrir una caja y dejar ir todo lo que estaba contenido. Siempre me ha gustado la mitología griega y el símil me pareció el más adecuado. Pandora abrió una caja que desencadenó todos los males del mundo y en ella quedó solamente la esperanza. Muchas veces las emociones, sobretodo las negativas, son percibidas como algo malo. Nos enseñan a contenernos, a controlarnos. Si eres feliz, debes serlo en voz baja. Si lloras, que no te escuchen. Nadie tiene tiempo para atender las emociones del otro y eso, al final, genera una incapacidad emocional que hace que no sepamos cómo a quién dirigirnos cuando nos ocurre algo que nos duele o hace feliz. Por eso mismo, escribir Pandora fue cómo abrir esa caja repleta de emociones a punto de estallar.
En el Grupo Editorial Europa agradecemos a Carlota Valdivia por su disponibilidad y le deseamos buena suerte con Pandora.
Este es todo por hoy y es tiempo de despedirse, pero nos veremos pronto con un montón de novedades.
Besos y Abrazos
Rachele