«No dejes que nada ni nadie te tumbe en la vida tan solo el sueño y si sueñas que sean para vivirlos…»
Queridos lectores, hoy vamos a conocer a Veneno en la Red, escrito por Brianda White y publicado por el Grupo Editorial Europa.
Veneno en la Red es una obra genial, innovadora, brillante y, por eso, en el Grupo Editorial Europa hemos decidido conversar con Brianda White para conocerla mejor y descubrir algo más sobre su libro.
A continuación ofrecemos la entrevista a la autora…
¿Qué le gustaría decirle a sus lectores?
Lo primero que me gustaría decirles según mi experiencia vivida es que la vida no acaba aquí en este mundo. Que para llegar y subir ahí arriba sin ningún tipo de problemas e ir directos al cielo hay que dejarse los deberes bien hechos aquí abajo en la tierra. Pues existe un mundo superior en otro plano el cual no todo podemos ver, sentir, acceder e inclusive controlar que está lleno de seres de luz que nos protegen ante el peligro o la adversidad.
Que cualquier situación en la vida por muy nublada que nos parezca el ser humano es más fuerte de lo que piensa y constantemente luchará por la supervivencia aun cuando sienta la acechanza de la muerte sobre él. Siempre y cuando esta no venga a por él porque haya cumplido su rol en esta vida y le haya llegado su fecha de caducidad.
Cuando no es tu día nada malo debe ocurrir pues el destino y la voluntad divina estarán a nuestro favor siempre, nunca perdamos la fe. Yo he tenido la gran suerte de poder ver más allá de este plano e interactuar con ellos para la resolución de varios acontecimientos muy complicados que he tenido a lo largo de los últimos años en mi vida y siempre mediante manifestaciones divinas me han hecho ver y sentir que no
estaba sola que ellos estaban conmigo cuidándome, su manera era haciéndose notar, obviamente.
Quizás mi designio es dar testimonio de ello mediante este libro, transmitiendo mis vivencias a otras personas. Con ello no pretendo cambiar la creencia del lector, pero sí hacérsela cuestionarsela. He podido ver, sentir y experimentar tantas situaciones fuera de lo común tan extraordinariamente extraordinarias que yo aún sigo cuestionándome a mí misma, pues hay cosas en la vida que son un gran misterio que la ciencia aún no ha podido comprobar y por ende explicar.
También les diría que como el sol que ilumina y la luna que ensombrece nuestros días, además existen los seres de oscuridad y que estos desde otro plano pueden ejercer su influencia sobre nosotros, aunque no los veamos, pudiendo llegar a fastidiarnos y mucho. Tan solo nosotros tenemos el timón de nuestros actos para con los acontecimientos y podremos navegar en la vida a favor haciendo el bien o en contra ejerciendo el mal y todo ello nos traerá las debidas consecuencias energéticamente positivas o negativas a nuestra existencia como dijo el gran filósofo Sócrates «vivir siguiendo la senda del bien» . Solo el que hace el mal es por ignorancia.
Y, por último, añadiría que lean mi libro que es una historia basada en hechos reales un tanto peculiar, donde el lector descubrirá cosas nuevas que pondrá en duda de su existencia y se sumergirá en una trama de insólitos romances e intriga que lo mantendrán atrapado a la historia hasta el final.
¿Hay un momento en particular que le empujó a escribir este libro?
Realmente tenía en mente poder algún día dar testimonio de ello y sacar todo a la luz, aunque sentía mucho miedo poder expresarme a través de él, me he sentido liberada cuando lo he hecho. Para mí era un gran reto armarme de valor y expulsar todo el sufrimiento que llevaba dentro de mí arrastrando una década.
Al final lo he conseguido, aunque lo veía imposible tal vez como un sueño que cualquier persona no puede hacer realidad, quizás el destino o la suerte contribuyeron a que sucediera. Con esto quiero recalcar la forma en la que llegué hasta ustedes (la editorial Europa Ediciones), y contársela fue de una forma para mi bastante curiosa que con mucho cariño recordaré.
Yo tengo dos teléfonos móviles, uno más moderno para su uso diario y otro más antiguo de reserva por si algún día tuviera que reemplazarlo y hacer uso de él por si el otro sufriera un accidente y se rompiera. Y que desde la experiencia que cuento en el libro que tuve con internet arranque todos los cables del wifi de mi casa y nunca jamas volví a contratar compañía de teléfono alguna ni nunca más lo haría, pues me aterroriza tan solo la idea de pensarlo por las secuelas que me han dejado. Un día me quedé sin datos del teléfono que uso a diario y pensé en comprar una nueva tarjeta con un número nuevo para ponérsela al viejo móvil y así tener más datos disponibles. Y al acceder a él me llegó un mensaje de Google de la editorial Europa Ediciones buscando escritores que quisieran publicar una autobiografía, pero debían pasar por una entrevista previa.
Sabemos que todo el mundo no nace escritor ni tan siquiera yo podía pensar que llegaría hasta ello, pero para mí fue un mensaje que en ese momento lo interprete como una señal que el destino me quiso enviar, había llegado el momento de sacar mi dolor y toda vivencia inusitada que pude vivir en primera persona y contarle al mundo entero. Aquel mensaje había sido el detonante causante de la causalidad y me lancé a por ello y ¿por qué no intentarlo? No tenía nada que perder. Me puse en contacto mediante ese mensaje que me llegó de la editorial, me entrevistaron y cogieron mi propuesta y ahí empezó toda esta andadura. Sentí que el destino estaba a mi favor, había llegado mi momento para explotar y soltar todo el dolor que arrastraba.
¿En qué escritor se inspiró?
No me he inspirado en ningún escritor. Aquí soy yo el personaje real de esta historia que la he vivido en mi propia piel. Aunque haya partes de mi historia que puedan parecer ficticias e inventadas, trágicas y extravagantes, todo está basado en historias reales. Quizás parezca descabellado o disparatado todo lo que cuento, pero es real, no es una autobiografía ficticia, es el diario que guardaba en la habitación de mi memoria.
Por eso para mí ha sido quizás más fácil poder escribir este libro pues realmente es un relato de los sucesos de los últimos tiempos de mi trayectoria de vida. Quería subrayar que si me ha ayudado bastante para inspirarme mientras escribía escuchar la frecuencia 936 Hz también llamada «la frecuencia de Dios» y con ella dejé mis recuerdos a vuelapluma.
Para mí no ha sido plato de buen gusto haber vivido todo esto pero muchas veces las situaciones llegan y no se pueden enmendar, doy por echo que son pruebas llegadas desde arriba que tenía que vivir sí o sí que recibiría las pertinentes instrucciones a seguir como enviada para su resolución para o por algún fin que hoy en día desconozco pues aún quedan lagunas o espacios por llenar como respuestas en recibir que quizás algún día queden despejadas, sólo Dios sabe. Por lo pronto me sirvieron para seguir viva después de varios intentos en los cuales quisieron acabar con mi vida. Hubo una frase de un hombre que me ayudó a seguir luchando por mi vida contra la muerte y no tirar la toalla, que nunca jamás olvidaré y permanecerá en mi subconsciente por los restos, esta fue «No morirás cuando ellos quieran sino cuando Dios quiera».
«No escribí esta obra ni con mi razón, lógica o la ayuda de alguna musa, quien la escribió fue el susurro de mis experiencias.»
¿Qué es la magia para usted? ¿Por qué eligió ese título?
La magia para mí puede ser explicada de diferentes formas. La magia es cuando alguien llamémosle mago, puede ejercer control espiritual sobre otras personas llegando a modificar comportamientos, salud, fortuna, sentimientos e inclusive ponerte el mundo al revés o arrebatarte la propia vida mediante rituales u tipo de órdenes que da a ciertas entidades oscuras pactadas con él etc. Pero, dentro de ello existe el mago negro o el blanco, cada cual tiene un papel diferente, aunque todos ellos se benefician de los elementos que nos da la madre naturaleza para llegar a ejercer su magia con los efectos deseados por este en su propio beneficio para hacer el bien o el mal a la persona o víctima. Unos nacen con ello como los protagonistas de la película «Juegos Inocentes» otros hacen pactos con entidades de muy bajo astral para llevar a cabo sus malévolos planes como he comentado anteriormente. Pero existe otro tipo que no sé que nombre ponerle, yo no lo llamaría magia sino lo llamaría don o talento recibidos de arriba como es en mi caso que yo adquirí como persona especial o elegida tras el transcurso de mis trágicas vivencias o quizás es innato lo desconozco, para realizar milagros «llamémosle así».
A mí me han servido para vencer aunque me provoqué a mí misma mi propia muerte por intentar liberarme de diversos hechizos y situaciones probando mi don, pero pude rectificar en segundos y salvarme a tiempo, no era mi día gracias a Dios, ya que nadie me ha dado un manual de instrucciones para su uso correcto es algo bastante complicado de manejar. Empecé por probar una cosa y luego otra hasta llegar al acierto porque modificar es fácil, pero volver al estado anterior es bastante complicado y menos en cuestión de segundos. Pues lo mío ha sido una gran lucha entre el bien y el mal, una guerra invisible que nadie ve, pero en mi caso yo sí, la cual he tenido que lidiar.
Es mi conclusión, estoy aquí para ello, aunque el mundo no se puede cambiar es totalmente imposible cada cual con su conciencia. También lo uso para sanarme a mí misma. He logrado quitarme dolores y molestias que tenía y me encuentro bastante mejor de salud gracias a Dios. Ya hubo una señora mexicana que tenía un gran don llamada Panchita que era una cirujana psíquica e hizo maravillas con muchas personas operándolas espiritualmente con sus manos para sanarlas.
Tuve que aprender a utilizar la herramienta que Dios me quiso dar para sanarme, supongo porque vio el gran daño que mis enemigos me hicieron gratuitamente y sin merecerlo. Por ello digo que si esas personas tienen el corazón bueno usarán esa herramienta para hacer el bien, pero si tienen un interior oscuro las usarán para causar daños que no estarán exento de culpa y que un dia allí esas personas lo pagarán pues tendrán que ser juzgadas antes de entrar por las puertas del cielo.
Ya todos sabemos que Dios ve todo nuestros actos e inclusive sabe todo lo que pensamos, a él no se le escapa nada, lo he podido comprobar por mí misma.
Traspasar el límite me da bastante miedo pues yo ejerzo como ratón de laboratorio y excederme rebasando los límites me pondría conllevar a grandes consecuencias nefastas. Sí que he podido mejorar mi estado de salud y llevar una vida bastante mejor de la que tenía quitándome fuertes dolores que padecía. No sé si podré sanar a personas aún no lo he comprobado no tengo claro si funcionaria me da bastante miedo pues si puedo mitigar el dolor o enfermedad bien, pero si lo hago y sale mal volver al estado anterior sería complicado como ya comenté, me falta saber al completo ese manual de instrucciones y no creo que lo descubra al completo, ya que es un gran riesgo. Y por último elegí este título porque fue una de las últimas experiencias más dura que viví que hace poquito tiempo que sucedieron y aún siguen frescas en mis recuerdos, estas me dejaron en estado de shock mismamente un poco antes de escribir este libro.
Aunque muchas de ellas las cuales he podido experimentar han sido demasiado traumáticas aunque esta no me la esperaba se salía de cualquier razonamiento humano, pues pensé como esa persona llamémosle «hechicero » ahora, había podido llegar a causar todos los efectos dañinos que me causó a través de la red wifi, pero la magia sin duda existe y no tiene fin. Quisiera recalcar antes de terminar que la ayuda de algunos de ellos fue indispensable para continuar con vida y con la ayuda de Dios, que para mí fue la más indispensable y la más grande que pude recibir.
¿Y tú? ¿Has sido alguna vez tocado y salvado por la mano y el gran amor de Dios?.
«No dejes que nada ni nadie te tumbe en la vida tan solo el sueño y si sueñas que sean para vivirlos.»
En el Grupo Editorial Europa agradecemos a Brianda White por habernos dedicado su tiempo y le deseamos buena suerte con Veneno en la Red.
Hoy os saludo, y nos vemos próximamente con tantas novedades en puerta…
Un Abrazo
Rachele